Dentro del Casino Nervión, ubicado en el centro de Bilbao, se encuentra el restaurante Ibaigane. En este estupendo espacio en el que la calidad y la magnífica atención son su sello personal, las vistas son inmejorables, ya que una enorme cristalera nos ofrece la ría y alguno de los edificios mas emblemáticos de Bilbao.
El amplio local permite que exista suficiente distancia entre las mesas, a diferencia de los nuevos restaurantes en los que las mesas son pequeñas y están muy juntas. Cuestion esta que es de agradecer cuando se desea tener cierta intimidad.
La carta es muy buena, pero sobre todo es de recomendar un menú degustación que ofrecen de unos 35 €, en el que los platos son de nueva cocina pero sin ser algo excesivo, como ocurre en otros restaurantes donde realmente hay veces que no sabes lo que estás comiendo. Los vinos estupendos.
Aún así, lo destacable de verdad es el horario de la cocina. Creo que en Bilbao no hay ningún restaurante (que yo conozca) que cierre a las 2:30 de la mañana la cocina, es estupendo. Sobre todo porque la atención del personal no desmejora a esas altas horas. Lo único que si os apetece acudir no olvideís el DNI, porque al ser un casino no pueden entrar menores y todas las personas han de estar identificadas.