Este restaurante se encuentra úbicado en un lugar privilegiado en el puerto de Castro Urdiales, a escasos metros del mar y en un paseo peatonal. Es un restaurante pequeño pero que cuenta con una terraza estupenda los días que hace bueno,el resto de los días es difícil conseguir sitio si no se ha reservado con anterioridad, porque en el interior solo hay 5 0 6 mesas. La terraza es realmente agradable los días soleados de otoño y primavera cuando el calor no excesivo, más bien fresquitos, además de limpios y claros.
Una de sus ventajas es que el horario de la cocina es amplísimo, se puede comer perfectamente a las 5 de la tarde o cenar a las 11 de la noche, así como tomar el primer pintxo desde las 12 de la mañana . En cuanto a lo precios hay un poco de todo. Dos personas pueden comer perfectamente por unos 20-25 € unos mejillones con tomate, unas rabitas, chopitos, gambas a la placha o un poco de pulpo a la gallega. Pero si la idea es gastarse más, perfectamente se pueden pedir unos percebes, langosta, cigalas o el pescado del día que seguro es estupendo y muy fresco.
También ofrecen una variada barra de pintxos, impresionante la cantidad que puede haber. Todos están buenos pero en mi opnión sobre todo los mejillones rellenos de besamel.
Un lugar muy bueno tanto para tomar algo, picotear o comer.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario